Reciclaje en casa
¿Crees que los objetos tienen una segunda vida? Pues sí, así es, muchas de las cosas que utilizamos día a día tienen una doble función como mínimo. Existen muchos objetos que nos sirven para ambientar nuestra casa. Podemos darle vida y carácter a nuestro hogar con cosas cotidianas que jamás hubiéramos pensado. Solo necesitamos un poco de creatividad, ¿para qué? , para encontrar esa doble vida a aquello que vemos viejo o que hemos abandonado. Sé que no os estoy contando nada que no sepáis pero siempre se le puede dar una vuelta más y sumergirnos en el mundo del diseño de interiores.
¡En el mundo la decoración no hay límites, todo sirve!
Un palé
Altamente versátiles, los pales, los podemos usar tanto para interior o como exterior. Los muebles fabricados con pales son personalizables y muy singulares, además de ser muy económicos. Las formas de utilizarlos son infinitas podemos hacer con ellos desde una tumbona, una mesa, un sofá, un escritorio…
Algunos los encontramos prefabricados, y de lo contrario los podemos encontrar en la calle, con pocos materiales podemos crearlos.
En casa me hice lo típico, los sofás de la terraza, la verdad es que tuve la suerte de que me los regalaron, pero luego tienes que lijarlos y darles un barniz mate si quieres que continúen con su color original pero para que así aguanten un poco más las inclemencias del tiempo.
Tarros de cristal
Los tarros de cristal son objetos del día a día, ya que muchos de los alimentos que compramos vienen en tarros, normalmente la vida de estos es muy corta, ya que van a la basura. Pero no nos damos cuenta de que nos pueden dar mucho juego y más si nos gustan las manualidades.
Nos pueden dar juego en la cocina, en el cuarto de baño, en la mesa del salón, como vaso, como lámpara (es mi reciclaje favorito sin duda, pero también el más complejo)…
Botellas de vidrio
Con estas ideas te vas a pensar el volver a tirar las botellas de vidrio. Es una idea muy sencilla, pero que a su vez le da le aporta mucho estilo al hogar. Gracias a estas botellas vamos a salir de la monotonía en la decoración. Las podemos usar simplemente como floreros, como lámparas, jardineras, antorchas…
Soy de las que cuando va a un restaurante pide agua siempre y si la botella es de cristal y me gusta me la llevo (¡siempre pidiendo permiso claro! jaja).
A ver si voy a casa de mi madre y hago fotos porque tiene una colección de botellas de cristal súper chulas.
En mi casa de toda la vida han sido muy aficionados al vino y cuando nos juntamos toda la familia alguna vez que otra hemos comprado las botellas que llaman Magnum (si, si, como los helados) y hay de diversas capacidades algunas de muchos litros de vino, y con ellas fabricamos lámparas, prometo hacer fotos chulas y subirlas.
También con botellas de cava hemos fabricado lámparas pero de mecha, quedan muy chulas también.
Haré un post de cosas que he hecho para que las veáis.
Cajas de frutas
Al igual que los pales, son objetos que podemos encontrar; o bien ya en tiendas, o en la calle. Es decir, si pasas por delante de alguna frutería y te fijas, las frutas se encuentran en estas cajas, al final del día estas cajas van a la basura, así que, que no te de ninguna vergüenza en pedirlas o cogerlas tu misma del contenedor.
Las que ya no se encuentran en fruterías son las de madera maciza pero bueno que no cunda el pánico que si queréis de esas cajas yo os las puedo facilitar a muy buen precio.
Hay mil ideas para usar una caja de fruta desde una mesilla hasta un simple revistero, seguro que ya sabéis miles de maneras de utilizarlas, si queréis contarme la vuestra estaré encantada de oírlo (o leerlo en este caso).
Libros y revistas
¿Cuántas revistas pensamos que no nos sirven y tiramos?
Se acabo el tirarlas, las revistas y libros bien organizados, van a darle vida a nuestra casa. No es algo muy común utilizarlos como elementos decorativos. Lo único que tenemos que hacer es apilar unas cuantas revistas y unos cuantos libros y sobre ello podemos poner velas, jarrones, marcos o simplemente dejar la pila de libros y revistas.
¡Gracias por leerme!
Un besazo